Las patinetas eléctricas hoverboard tuvieron su clímax y su eclipse esta misma navidad. Así lo quiso demostrar a sus feligreses un sacerdote en Filipinas, quien aprendió a movilizarse bien en una de ellas. Así lo demostró en la Misa de Gallo, el pasado 24 de diciembre.
La Diócesis de San Pablo señaló este martes en un comunicado que “antes de la bendición final de la Misa de Nochebuena, como una forma de saludar a sus parroquianos, el sacerdote cantó una canción de Navidad, mientras que iba alrededor de la nave (del templo) parado sobre una hoverboard”.
“Esto estuvo mal”, aseguró la diócesis, que precisó que “la Eucaristía demanda el máximo respeto y reverencia” pues “es el Memorial del Sacrificio del Señor”. Ese paseo le costó al sacerdote Falbert San Jose, en la iglesia de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa en Biñan (Filipinas), una sanción, asegura Aciprensa.
La Diócesis de San Pablo publicó hoy un comunicado anunciando que será separado de la parroquia y pasará un tiempo reflexionando sobre lo ocurrido.
“Consecuentemente, no es una celebración personal, donde uno puede caprichosamente introducir algo para llamar la atención de la gente”, criticó.
La Diócesis de San Pablo señaló además que el P. Falbert San Jose reconoció su error “y prometió que no sucederá otra vez”.
“Él se encontrará fuera de la parroquia y dedicará un tiempo para reflexionar sobre este último evento”, explicó la diócesis, que añadió que el sacerdote filipino “quiere disculparse por lo que sucedió”.
Se suponía que el hoverboard iba a ser el juguete estrella esta temporada, pero los accidentes e inexplicables y repentinas explosiones de sus baterías hicieron que se prohibiera su venta.
Diversas líneas aéreas en todo el mundo han establecido entre sus políticas rechazar el transporte de las “hoverboard” debido al peligro de explosiones e incendios.
Fuente: El Universo