La actriz australiana Rebel Wilson contó a la revista People los tratamientos a los que ha aplicado para quedar embarazada. Algunos de los cuales implicaron su evidente pérdida de peso. La entrevista fue ideal para que Wilson diera detalles sobre la dedicación que lleva en pro de convertirse en su mejor versión.
Asimismo, la estrella de la película recientemente estrenada en Netflix «Senior Year» soltó que se embarcó en esta travesía en 2020, momento que consideró su «año de salud».
A su vez, Rebel Wilson hizo mención al hecho de que padece el síndrome de ovario poliquístico, impedimento para quedar embarazada, por lo que asistió al médico en 2019.
Según un especialista en fertilidad tendría más efectividad congelando sus óvulos si perdía peso. «El me miró de pies a cabeza y dijo ‘tendrías mucha más suerte si estuvieras más saludable’», recordó la estrella de 42 años de edad.
Ante este crudo comentario Wilson se motivó a mejorar su físico con la expectativa de algún día ser mamá. «Yo pensé en ese momento ‘este tipo es muy grosero’ pero él tenía razón, yo tenía demasiado sobrepeso. Era como si no pensara en mis propias necesidades. Querer un bebé me motivó a ser más saludable».
Según la revista, la artista perdió en 2020 más de 30 kilos, un paso que según Wilson no está anclado a lo superficial. «Era sobre lidiar con problemas emocionales que me llevaban a atracones de comida, fue todo un proceso», destacó.
De la misma manera, dijo que la experiencia estuvo llena de superación, llanto y autoanálisis. «Lloras mucho, analizas tus motivos, nunca había hecho eso antes. Es muy difícil entender porqué no te sientes digna de las cosas buenas».
Fuente: Chévere