Por qué todo el mundo llama a Japón el país del sol naciente

China se desarrolló mucho tiempo antes que Japón, quienes compartieron posteriormente sus filosofías, políticas, religiones e incluso su lenguaje escrito. Por tanto, con una influencia tan poderosa, es razonable pensar que cuando se describió a Japón en sus comienzos, todo partió de la perspectiva china.

Cuentan los historiadores que comenzó en el 607 d.C., momento en que el Príncipe Shotoku de Japón envió a una misión diplomática a China con la idea de absorber todo lo que pudiera de una cultura que admiraba.

Bajo la dirección de Shotoku se adoptaron modelos confucianos de rango, se adoptó el calendario chino, se desarrolló un sistema de autopistas, se construyeron numerosos templos budistas, se recopilaron crónicas judiciales, se enviaron estudiantes a China para estudiar budismo y confucianismo, y se establecieron relaciones diplomáticas formales con China.

Además, a Shotoku se le conoce en Japón por la acuñación del nombre Nippon (Nihon) para Japón. Su kanjis en el lenguaje son 日本, y vienen a ser una combinación de “sol, día” y “origen”.

En el 607, cuando se dio la primera embajada de la dinastía Sui, Shotoku envió una carta al emperador Sui, Yangdi, “del Hijo del Cielo en la tierra donde el sol se levanta al Hijo del Cielo en la tierra donde se pone el sol”. La idea con este saludo era la de establecer una relación de igualdad entre ambos países (y no una tributación).

Aparentemente, los chinos se ofendieron de que Shotoku tratara de ponerse como “Hijo del Cielo” en el mismo plano que el emperador chino, también “Hijo del Cielo”. A pesar de todo, en el 645 a. D., y de acuerdo con la historia japonesa, un golpe de palacio condujo a la introducción de la Reforma Taika (que significa “gran cambio”). Con el objetivo de centralizar aún más el gobierno, la reforma eliminó la propiedad privada de las tierras y las puso bajo el control del gobierno centralizado, con “personas que dirigen los súbditos del trono”.

Como parte de esta reforma, Nippon, Nihon (ambos significando “origen del sol”) y Dai Nippon (Gran Japón) fueron utilizados “en documentos diplomáticos y crónicas” en lugar de Wa (Wo), que era como se llamaba anteriormente a Japón y que significaba algo así como “país pequeño”.

Sin embargo, en los registros chinos el cambio del nombre no fue tan bien recibido y sus cuentas son algo diferentes. Nippon apareció en la historia solo a fines del siglo VII. El Antiguo Libro de Tang, una de las Veinticuatro Historias, declaró que al enviado japonés le disgustó el nombre de su país y lo cambió a Nippon, u “Origen del Sol”. Sin embargo, en otras crónica del siglo VIII se afirma que la emperatriz china Wu Zetian ordenó a un enviado japonés cambiar el nombre del país a Nippon.

Sea como fuere, lo que parece claro es que el nombre se quedó tal cual, y durante los últimos 1400 años más o menos, el mundo se ha referido a Japón como Nippon, la tierra o país del sol naciente.

Fuente: Gizmodo