NVIDIA anunció que, por primera vez, fabricará íntegramente sus supercomputadoras de inteligencia artificial en Estados Unidos.
En colaboración con empresas como TSMC, Foxconn, Wistron, Amkor y SPIL, la producción de los chips Blackwell ya comenzó en Phoenix, Arizona, mientras que se construyen instalaciones en Houston y Dallas, Texas.
La compañía planea invertir hasta 500 mil millones de dólares en infraestructura de IA en los próximos cuatro años, fortaleciendo su cadena de suministro y generando cientos de miles de empleos.
Estas supercomputadoras serán el núcleo de nuevos centros de datos dedicados al procesamiento de IA.