Decía Arthur C. Clarke que cualquier tecnología lo suficientemente avanzada es indistinguible de la magia. A veces, solo a veces, logro tener un atisbo de esa magia que nos rodea y que ignoramos displicentemente solo porque estamos familiarizados con los arcanos que la hacen funcionar. Hoy he tenido uno de esos maravillosos momentos gracias a un invento llamado Meater.
Meater es un pincho, un simple clavo metálico con la base de plástico negro. Su simplicidad, sin embargo, esconde uno de esos inventos que nos recuerda (o debería hacerlo) hasta qué punto hemos llevado lejos nuestra tecnología.
En el interior, Meater lleva un sofisticado termómetro digital capaz de medir la temperatura de la carne. En ese sentido tampoco es nada nuevo. Los cocineros y cocinillas llevan décadas usando termómetros para calcular cuánto tiempo le queda a un pavo, o a un pollo asados, a un redondo de ternera o a un simple entrecot.
Lo que hace genial a Meater es la combinación de tecnologías. El funcionamiento es simple. Clavas el pincho en lo que quiera que vayas a cocinar, y seleccionas el tipo de alimento (carne, pescado, pollo), el tipo de corte de la carne (solomillo, filete, entrecot, asado…), y el punto exacto al que quieres cocinarla en una aplicación para el móvil.
La aplicación calcula cuál es el tiempo de cocción para la pieza en función de tus preferencias. Tú tan solo tienes que seguir las instrucciones y reunirte con tus invitados para disfrutar de una cerveza mientras el plato se cocina. Una alerta en el móvil te avisa de que regreses a retirar el alimento del fuego. La aplicación tiene en cuenta el peso e la pieza y también el tipo de carne, y dispone de un modo manual que permite seleccionar la cocción que más nos guste en caso de que conozcamos esa preferencia. Si no la conocemos, pero nos ha gustado y hemos dado con ella por pura casualidad podemos acudir al histórico de platos y guardar la cocción como predeterminada para otro día.
Meater se conecta directamente al móvil por Bluetooth, obviamente resiste temperaturas altísimas y tiene una autonomía de hasta seis horas. La pequeña caja de madera e la que se guarda le sirve de cargador. El dispositivo está ya disponible y cuesta 99 euros.
Meater, volviendo a lo que hablábamos al principio, representa uno de esos momentos en los que te das cuenta de que sabes hacer magia. La tecnología me permite entender otros idiomas sin hablarlos, encontrar mi camino en ciudades extrañas, saber si alguien me llama en completo silencio, o comunicarme solo con mover mis dedos. Ahora, mi repertorio de conjuros incluye saber cuándo los solomillos están perfectos para comer. Es como un pequeño truco de magia. Puede ser banal, sencillo e intrascendente, pero hace mi vida más fácil de manera discreta, y eso es genial.
Fuente: Gizmodo