La FEF redujo la sanción por doping de Michael Arroyo y al médico Gustavo Peralta

Michael Arroyo volverá a jugar en mayo de 2019, luego de que el Tribunal de Apelaciones de la Ecuafútbol redujera la sanción impuesta por la Comisión Disciplinaria, en noviembre del 2018, por doping. En primera instancia era de un año, y quedó en seis meses.

Según explicó el abogado del deportista, Andrés Holguín, el tribunal acogió su alegato de que en este caso no habría reincidencia, puesto que el primer incoveniente de Arroyo se dio hace más de 10 años.

“No hubo reincidencia y eso se probó, el proceso se cumplió y se redujo la suspensión a la mitad”, dijo Holguín. Arroyo fue suspendido en noviembre pasado, tras encontrarse restos de hidroclorotiazida, un diurético prohibido por la Agencia Mundial Antidopaje.

Previamente el jugador fue suspendido por la FEF en el 2007, debido a que se encontraron restos de marihuana en su muestra de orina, cuando militaba en el Club Sport Emelec.

En el caso de Peralta, médico de Barcelona SC que según la FEF fue responsable de suministrar la sustancia al jugador, también se le redujo la sanción a la mitad. En primera instancia su suspensión era de cuatro años y solo deberá pagar dos.

Peralta salió intranquilo por la resolución. “No tengo nada que ver”, dijo el Galeno al salir del auditorio. Adelantó que podrían llevar el tema a otras instancias, para que la sanción quede sin efecto.

La audiencia se inició a las 10:00 y se extendió hasta las 16:30. El jugador estuvo ausente durante el proceso, solo envió a su abogado, mientras que Peralta asistió personalmente.

Fuente: El Comercio