Este lunes 9 de septiembre, la ciudad de Guayaquil amaneció sin servicio de buses urbanos debido al paro convocado por la Federación de Transportistas Urbanos de Guayaquil (FETUG). Los transportistas demandan un aumento en la tarifa de pasaje, que actualmente es de 30 centavos, solicitando un incremento a 45 centavos. Sin embargo, el alcalde Aquiles Álvarez ha rechazado esta propuesta, afirmando que no cederá a las presiones y que cualquier ajuste se hará pensando en el bienestar de los ciudadanos.
A pesar del paro, 14 cooperativas de transporte han mantenido su operación. La Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM) ha implementado medidas para mitigar los efectos de la paralización, como el aumento de unidades del sistema Metrovía y un monitoreo constante de la situación. Además, se han reportado actos de vandalismo y bloqueos de buses en varias zonas de la ciudad.
Este conflicto sigue sin resolverse, afectando gravemente la movilidad en Guayaquil, mientras las negociaciones continúan.