En un giro insólito en una exposición de arte en Moscú, un guardia de seguridad protagonizó un extraño incidente al intentar comerse una obra de arte mientras trabajaba.
La pieza afectada, titulada “Escape of the Goldfish”, mostraba una pecera con un pez sobresaliendo junto a un cuadro del mar.
En un vídeo viral, el guardia se ve tirando de los elementos de la obra y hasta intentando darle un mordisco al pez.
Atribuyó su comportamiento a una noche de insomnio.
Tras el incidente, fue suspendido, y la obra restaurada.
Un suceso que deja boquiabiertos a muchos.