A más de un año de haber solicitado el divorcio y luego de que este se ha quedado estancado en los tribunales, ahora sí Jennifer Garner y Ben Affleck han alcanzado un acuerdo que presentarán en la Corte de Los Ángeles en cuanto el actor salga de la clínica de rehabilitación, a la que ingresó el pasado 22 de agosto, para superar su adicción al alcohol.
De acuerdo a TMZ, sitio especializado en celebridades, los actores no firmaron contrato prenupcial, lo que les facilitó lograr un acuerdo para repartirse los bienes y ganancias en un 50%.
Además la custodia de sus tres hijos será compartida tanto legal como física, publicó el medio de espectáculos.
En este sentido, los actores serán flexibles en cuanto a horarios y días, ya que se basarán en sus agendas de trabajo, no quieren regirse por turnos que pudiera establecer el juez.
A pesar de vivir separados desde el 2016, la pareja de actores han tenido una relación respetuosa y amigable por el bien de sus tres hijos: Violet, de 12 años, Seraphina, de 9 y Samuel, de 6.
Affleck y Garner se casaron en el 2005, se separaron en el 2016 y en abril del 2017 solicitaron su divorcio.
Y fue justo Jennifer quien llevó la semana pasada a su aún esposo a la clínica de rehabilitación The Canyon, para que puede superar su alcoholismo, en el que recayó durante las últimas semanas.
La decisión de internarlo la tomó la protagonista de “Elektra” luego de ver una fotografía donde Affleck recibe un pedido de cervezas en su casa de Pacific Palisades en Los Ángeles. Además de que días antes se había caído de su guagua por estar demasiado ebrio.
La situación la habló con el actor, quien también estuvo de acuerdo que necesitaba ayuda urgente, y por eso fue ingresado a la clínica The Canyon, en donde se espera que pase varias semanas.
Esta es la tercera ocasión que el actor de “Batman” está en rehabiliación, la primera fue en 2001, y la segunda vez fue en diciembre pasado.
Fuente: El Nuevo Día