¿Quién no ha entrado en pánico al descubrir que su producto favorito dejará de fabricarse? Eso le pasó a Adele al enterarse de que su faja favorita, un body de Spanx, sería descontinuado. La cantante de 36 años, que ha usado estas prendas moldeadoras desde su adolescencia, compartió su angustia durante un espectáculo en Las Vegas. “Es como la mitad de mi vida”, confesó.
Desesperada, sus amigos y contactos trataron de conseguir todas las existencias, y aunque los jefes de Spanx le enviaron algunas, eran una talla más pequeña. Adele, con su característico humor, comparó la experiencia con “rellenar una salchicha”, pero decidió usarlas de todos modos, bromeando sobre el riesgo de cortar la circulación. ¡Vaya drama fashionista!