La reciente suspensión de tres líneas de buses en Guayaquil ha complicado la movilidad de numerosos ciudadanos.
Anteriormente, algunos pasajeros realizaban su trayecto con un solo bus; ahora, deben abordar hasta tres diferentes, incrementando tiempo y costos.
Esta situación ha generado inquietud entre los usuarios, quienes expresan su preocupación por la falta de alternativas eficientes de transporte público.
Las autoridades locales han reconocido la problemática y están evaluando soluciones para mitigar el impacto en la comunidad, incluyendo la posible incorporación de nuevas unidades al sistema de transporte urbano.