Con un repertorio compuesto por sus éxitos más recordados, canciones de colegas y el material de su nueva producción “Todavía”, el cantautor cubano Francisco Céspedes regresó ayer, a la sala Sinfónica del Centro de Bellas Artes de Santurce.
En la velada, llamada “El regreso de Francisco Céspedes”, el artista también conocido como Pancho entonó canciones desde su salto a la fama en 1997 hasta sus composiciones actuales.
El concierto inició a las 6:00 p.m. con una apertura a cargo de la joven músico Mónika Nieves junto a su banda Pasajeros del tren. El grupo interpretó tres temas (“Sin preguntar”, “Ego” y “Demasiadas excusas molestan”) que fueron acogidos por un público que incluso se levantó a aplaudir. Entre estos, se encontraba el cantautor puertorriqueño Glenn Monroig.
Unos minutos después Céspedes subió repentinamente al escenario para cantar “Donde está la vida”, uno de los sencillos más conocidos del artista. Al finalizar, la audiencia fanática que no acaparó del todo el espacio exclamó “bravo” y aplaudió prolongadamente.
Tras los saludos de rigor, que incluyeron al comediante cubano Alexis Valdés que presentaba su espectáculo “Sin censura” en otra sala de Bellas Artes y a los músicos del Heineken Jazz Fest que concluía anoche mismo, el cantante continuó con “Parece que”, “Qué hago contigo” y “Todo es un misterio”.
Más adelante, entonó “Lágrimas negras” del Trío Matamoros en honor al fenecido Cheo Feliciano acompañado por el cubano Pupi Santiago. Posteriormente, Santiago reveló haber conocido a Céspedes a los 16 años y compartir con él gratos recuerdos.
Otro artista fenecido que fue homenajeado por el cantante fue la leyenda musical Ignacio Villa Fernández, mejor conocido como Bola de Nieve, a quien describió como “lo más grande que he conocido como intérprete”. Para recordarle, interpretó “La flor de canela” que dio paso al tema “Alma mía”, de María Grever, canción que añadió sin estar en su repertorio de la noche y con la cual demostró su potencia vocal subiendo y bajando de tonos drásticamente.
Luego continuó con “Se me antoja”, interpretación con la que transformó el humor de la noche a uno más jocoso bailando en el escenario, haciendo muecas y jugando con los tonos de voz.
Puso a la audiencia de pie
Uno de los momentos más esperados de la noche fue la interpretación de “Señora”, una de las canciones más conocidas del cantautor que forma parte de su producción discográfica Vida loca que internacionalizó su carrera musical. Tan pronto terminó, toda la audiencia se puso de pie para aplaudir. Entre estos, el secretario de Estado, David Bernier, y su esposa, la presentadora Alexandra Fuentes.
La velada continuó con los temas “Átame la mirada” y “Esta tarde vi llover” en los que se detenía a interactuar con la audiencia que le platicaba de vuelta. “Soy un hombre desahuciado por las mujeres, aprendí a tener esperanzas solamente en el camino de la música”, bromeó.
Seguidamente, el artista invitó a Glenn Monroig al escenario para cantar junto a él “Nunca más”, tema muy aplaudido por la audiencia. De hecho, se escuchaban elogios entre el público sobre el talento musical y vocal de Monroig.
Para dejar un recuerdo fresco de lo nuevo antes de cerrar cantó su nuevo sencillo “Todavía”. Y finalmente, culminó su espectáculo de más de 25 canciones con el tema “Vida loca”, sencillo que hizo a la audiencia cantar a coro y aplaudir de pie.
Fuente: AP