Red Eléctrica Española informó que el colapso total del sistema eléctrico peninsular se debió a una fuerte oscilación de potencia y una significativa pérdida de generación.
Esto provocó la desconexión de la red española del sistema europeo, afectando también a Portugal.
Aunque se investiga el origen exacto, el desequilibrio entre generación y demanda llevó a una ausencia total de tensión.
Eduardo Prieto, directivo de la compañía, pidió evitar especulaciones y advirtió que la reposición del servicio podría tardar varias horas debido a la complejidad del proceso.