Con bailes, desfiles y adornadas carrozas se celebró a Guayaquil este 9 de Octubre

Una representación del Guayaquil diverso que acoge a todo aquel que busca un terruño para emprender hacia el progreso se mostró este viernes al pie del parque La Victoria, en pleno centro, donde estaban estacionadas las carrozas con las cinco alegorías de las colonias extranjeras radicadas en esta ciudad, que vibró de civismo por sus 195 años de independencia.

Llegaron antes de las 09:00, desde la avenida Las Esclusas, del sur, como parte de la primera etapa del desfile ‘Guayaquil Independiente es mi Destino’, que empezó desde las 07:00.

Esto, mientras el presidente Rafael Correa, funcionarios del Gobierno; el alcalde, Jaime Nebot, y la vicealcaldesa, Doménica Tabacchi, colocaban sendas ofrendas florales en la Columna de los Próceres del Parque Centenario, en tributos que se dieron por separado.

Y, a las 09:00, en la avenida Quito había un regocijo cívico. Los estudiantes de planteles particulares tocaban con fervor las liras y bombos para producir ritmos como El negro José, Lambada, entre otros.

Esas melodías matizaron el preludio para la segunda etapa del desfile que tuvo como novedad las carrozas alegóricas de Colombia, China, España, Italia y Líbano. Cada una recreó sus características culturales.

A estas se sumó una sexta, que mostró el Hemiciclo de La Rotonda, la Columna de los Próceres y la Torre Morisca.

A Sara Martínez le atrajo la carroza libanesa, que tuvo una recreación del personaje animado de Aladino rodeado de lámparas mágicas y jarrones, con una aldea de fondo.

“Está muy linda, apenas la vi le dije a mi hija para tomarle unas fotos aquí”, contó.

A las 10:00 empezó la segunda fase del desfile. El estribillo Guayaquileño madera de guerrero/ bien franco muy valiente/ jamás siente el temor/ retumbó en la Quito y se extendió a la 9 de Octubre, por donde también cruzó el pregón. Provenía de las liras, timbales y trompetas de las bandas de música de colegios como la Academia Naval Almirante Illingworth, Teniente Hugo Ortiz, 9 de Octubre, Altamar, General Baden Powell, Thomas Wright, entre otros.

Y era repetido por quienes fueron a ver el desfile.

En la tarde siguió la tercera etapa del pregón que avanzó hasta el Malecón y recorrió dos kilómetros más, con bailes folclóricos y comparsas. Este año cada grupo de baile representaba a un país distinto, demostrando que la ciudad es la cuna de la diversidad donde se han asentado varias culturas.

Fuente: El Universo