Con la toma de versión de dos policías ayer se inició la audiencia de juzgamiento en contra de la exjueza Lorena Collantes, en la sala 4 de la Unidad Judicial Penal Norte 2, en el centro comercial Albán Borja, norte de Guayaquil.
A la exfuncionaria pública se la acusa en el proceso de ataque y resistencia. Ella supuestamente habría agredido a los policías que acudieron a un restaurante en Urdesa, en el norte de la ciudad, en noviembre. Parte de este hecho fue grabado y se viralizó a través de las redes sociales.
La audiencia, iniciada pasadas las 14:30, tuvo la presencia de los abogados de ambas partes, incluyendo la exjueza, que llegó en compañía de allegados. Ni a la entrada y ni a la salida dio declaraciones a la prensa.
Durante el escándalo en el restaurante de Urdesa, la exjueza adujo ser funcionaria pública. Ella debía pagar $ 126 por la cuenta.
Con esos antecedentes, Collantes fue llamada a juicio a fines de diciembre del año pasado. En marzo hubo una fallida audiencia de juzgamiento.
A su entrada a la sala del Tribunal de Garantías Penales, la parte acusatoria, integrada por Héctor Vanegas, defensor de los cuatro policías, exhortó que en la audiencia no se dilate y se dictamine una sentencia.
Al menos una veintena de testigos, entre ellos varios policías, se presentarán en la audiencia, lo que la alargaría por unos dos a tres días, explicó Vanegas.
Aseguró tener todas las pruebas necesarias para comprobar sus acusaciones en contra de la exjuezs del Guayas.
Durante la audiencia que duró dos horas se tomaron los testimonios de una mayor y sargento que habrían sido víctimas del ataque y resistencia.
Cada uno relató las palabras, los supuestos insultos y amenazas recibidos de la exfuncionaria judicial.
Según el artículo 283 del Código Orgánico Integral Penal la pena por el delito de ataque o resistencia va de seis meses a dos años de pena privativa de libertad.
Vanegas aclaró que requerirán la pena máxima en este proceso.
Pasadas las 16:30, la audiencia fue suspendida por la salida de uno de los jueces del tribunal.
Fuente: El Universo